Reseña de Ana María Romano Gómez: Hasta mañana al día siguiente

Por: Ricardo Chávez (RicArtur / DDONN)

Enfrentarse a la obra de alguien que es un completo desconocido siempre será un ejercicio interesante, más si la persona en cuestión es, como Ana María Romano, una artista de dilatada trayectoria. Al adentrarme en su disco “hasta mañana al día siguiente” me dejo llevar en esas caminatas de registro, por ese acordeón nostálgico y los objetos sonoros. El cuidado con el que genera texturas, las ordena y manipula luego se destaca enseguida, incluso se puede hablar de delicadeza en la mezcla. Hay una narrativa que luego de escuchar otros trabajos suyos, se intuye como propia.

Artistas que usan el paisaje sonoro incluso como posicionamiento político siempre me ha sido grato descubrir, los ambientes que generan y que suelen hacerme soñar despierto son de agradecer siempre, me hacen imaginar mundos distópicos, post apocalípticos, en los que la esperanza podría ser un recurso aún más valioso que el agua.

El uso del ritmo como mecanismo que toma el pulso a las ciudades que visita no es elusivo en su trabajo, donde los artistas que optan por expresarse haciendo ambient noise, ambient drone, landscapes, y en general la experimentación generando sonido con objetos o manipulando registros sonoros; son una especie rara en nuestra América Latina, donde los mecanismos que nos tienen consumiendo músicas que ayudan a la hipersexualización (o solo la reflejan), jamás pondrán atención a las músicas de riesgo.

Me han pedido que lo califique, no soy de los que cree en los rankings desde hace mucho pero le doy 5 de 5, recomiendo que escuchen este trabajo y escapen con su propuesta a un ejercicio de imaginación.