
Luly Herrera es una artista ecuatoriana que se dedica al estudio de la música precolombina, ecuatoriana y al desarrollo de paisajes sonoros basados en voces y en instrumentos de arcilla. Su profesión en turismo, la ha llevado a enriquecer su trabajo musical con texturas místicas, pentafónicas y la electrónica de grabaciones del Ecuador indígena.
Su album “Umbral a un sueño”, es su primer trabajo en plataformas y es fruto de la investigación social, artística y cultural que esta artista viene desarrollando a lo largo de su carrera.
Con 5 tracks, Luly nos transmite lo que ha descubierto a modo de un sueño. Se trata de un recorrido místico y nocturno por comunidades nativas latinoamericanas como la de los Kotamas. Nos habla de lo que ocurre allá fuera, en la selva ecuatoriana, cuando se está al umbral del sueño. Escuchamos voces, animales, salpicones de agua y cantos mezclados con el viento.
Al titular este trabajo como “Umbral a un sueño”, podemos concluir que estas músicas son producto de una profunda introspección de la autora, que en lo personal, atribuyo a su propia inmersión y estudio de la cosmovisión indígena.
El miedo a lo desconocido, a lo que no se puede tocar ni entender pero también la curiosidad y la necesidad de querer explicarlo… Esas son ideas y emociones que me deja este trabajo. Al final, todas las culturas, las comunidades y los grupos humanos, independientemente de sus historias, pasamos por estas preguntas y las retratamos en… ¿sueños? Me animaría a decir que en este caso, sí. Luly ha querido retratarlo en un sueño y compartírnoslo.
“Tiempo, agua y polvo”, la apertura de este album donde podemos escuchar instrumentos como la vasija silbadora de agua, la ocarina, la estatuilla y las flautas. Esta pieza no solo abre el album, si no que también nos transmite la idea de inicio. De EL INICIO.
“Umbral a un sueño”, nos cuenta la siguiente etapa del sueño, donde este se hace más profundo. En los primeros minutos, la artista muestra la textura principal de este track: Salpicones acuáticos en medio de una noche reveladora. Aquí también se encuentra el poema de Adrián David Guerra Layana. La pregunta inmediata que me deja este track es: ¿Cuál es la revelación? Deseo descifrarlo y seguir profundizando en el sueño.
“Cacería”, esta composición inicia contestando mi pregunta anterior con un discurso susurrado y rítmico. La electrónica sube y baja su participación como si el viaje onírico cambiara su densidad. De un sueño ligero a una especie de profecía. Para mí, es el punto climax de este recorrido.
“Nave tenka”, con un clima que parece contener las primeras horas de la mañana, esta pieza comienza a aclarar toda la información revelada en el viaje. Luly nos cuenta que “Tenka “significa corazón en lengua Tsáfiki y es verdad que al final de esta pieza, podemos escuchar cómo el latido del soñador lo va trayendo de regreso al mundo concreto.
Finalmente “Entre Kotamas”. Es la reflexión del sueño por el que hemos pasado, por el que Luly ha pasado en sus últimos años como artista investigadora. La primera mitad contiene sus propias palabras y en la segunda, nos dibuja la fiesta y la consonancia entre lo que fuimos al anochecer y lo que somos ahora, al despertar.
Gracias Luly, ha sido un placer poder escuchar tu trabajo y ser parte de este colectivo imaginario y real, del que venimos… Y al que vamos.